Carbohidratos: ¿Son necesarios y saludables?

Los carbohidratos, junto con las proteínas y las grasas, son un tipo de nutrientes importantes que representan la principal fuente energética del ser humano. Al digerirse y absorberse, proporcionan glucosa, la cual será empleada como energía o reservada en el hígado o músculos, pero cuando su ingesta sobrepasa el requerimiento diario, se almacenará como grasa. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que aporten entre 55% y 60% de las calorías totales diarias.

No obstante, los carbohidratos continúan siendo tema de debate, ya que se les responsabiliza por ser causantes del sobrepeso, obesidad y otras enfermedades, llegando a considerarse —en algunos casos— omitir su ingesta para evitar o tratar dichas patologías, pero se deja de lado los beneficios que otorga a la salud.

Considerando ello, la Lic. Lourdes Lazo, nutricionista de la USIL, señala que el organismo humano conforma toda una sabia maquinaria que requiere mantenerse en equilibrio y necesita todos los nutrientes, pero en una cantidad determinada según las variables independientes de cada persona.

Estos macronutrientes se pueden dividir en simples, aquellos cuya absorción es rápida, como la glucosa o fructosa que son conocidas como azúcares; y complejos, conformados por varios azúcares que necesitan ser fragmentados durante la digestión y se absorben más lentamente, como, por ejemplo, la celulosa, el almidón, etc.

Cobran especial preocupación los primeros, ya que, dentro de los patrones alimenticios, se identifica que un elevado consumo de azúcar o carbohidratos simples se relaciona con un aumento de peso y el riesgo de desarrollar diabetes, enfermedades cardiovasculares, entre otras[1]. Ante ello, la OMS recomienda limitar el consumo de azúcar añadido a máximo 5 cucharaditas diarias para el caso de los niños y 10 para los adultos.

Por otro lado, dietas bajas en carbohidratos se han visto asociadas con incrementar la probabilidad de padecer algún tipo de cáncer o cardiopatías, por lo que resulta importante evaluar el tipo de carbohidrato que compone mayoritariamente la alimentación, siendo más recomendables aquellos con aporte de fibra.

Así, por ejemplo, se ha visto que patrones dietéticos que son ricos en alimentos de origen vegetal tendrían efecto favorable en la salud, no únicamente por el aporte de fibra, sino por su contenido en polifenoles, los cuales intervienen en vías metabólicas en la digestión de carbohidratos, generando un cambio en su disponibilidad y, en consecuencia, modulan el metabolismo de la glucosa[2].

La especialista Lourdes Lazo precisa que los carbohidratos, además de ser una fuente de energía importante, conllevan múltiples beneficios según sea el tipo que se consuma. Por eso, en miras de mantener y preservar la salud, es necesario considerar patrones de alimentación que no lleven a extremos de retirar grupos de alimentos importantes, sino, más bien, buscar el balance, enfocándose en la cantidad y calidad de lo que se ingiere a diario.


[1] Großkopf, A., & Simm, A. (2020). Carbohydrates in nutrition: friend or foe? Zeitschrift für Gerontologie und Geriatrie, 53(4), 290-294.)

[2] Dall’Asta, M., Del Rio, D., Tappy, L., Potì, F., Agostoni, C., & Brighenti, F. (2020). Critical and emerging topics in dietary carbohydrates and health. International journal of food sciences and nutrition, 71(3), 286-295.