Convivencia familiar en pandemia: El rol de la comunicación asertiva


Actualmente el mundo está pasando una situación atípica a raíz de la pandemia COVID-19. Los Gobiernos tomaron decisiones para frenar el avance del virus y cuidar nuestra salud física (cuarentena); sin embargo, nuestra salud mental también ha sido afectada y debemos cuidarla.

Y es que esta nueva forma de vivir e interactuar con nuestro entorno puede ser en si una situación estresante, ya que es algo nuevo, algo a lo que no habíamos estado acostumbrados y que de un momento a otro hemos tenido que aprender a convivir con ello.

Uno de los cambios más notorios que se pueden apreciar es el que se ha dado en el hogar, y es que la casa se convirtió en escuela, en centro de trabajo y en lugar para la recreación, todo en uno, por lo que es crucial que podamos no solo saber organizarnos y distribuir adecuadamente las tareas en el hogar, sino también poder reforzar y trabajar la dinámica familiar para que la convivencia sea armónica, lo que se logra a través de una buena comunicación.

Comunicación Familiar

La familia es el primer lugar donde aprendemos a relacionarnos con nuestro entorno, con nuestra comunidad, por ende, es también el origen de nuestra forma de comunicarnos y de resolver problemas.

Una adecuada comunicación familiar tiene como finalidad que se satisfagan las necesidades emocionales de sus miembros, que se fomente el desarrollo integral de la persona (valores, responsabilidad, autoestima, expresión de emociones), se creen y se mantengan relaciones beneficiosas entre los miembros, así como se aprenda a respetar, tolerar y comprender.

¿Cómo desarrollamos una adecuada comunicación familiar?

A través de la comunicación nosotros expresamos nuestras ideas, pensamientos y emociones, ya sea mediante el uso de palabras (comunicación verbal) o con los gestos o posturas que mostramos hacia los demás (comunicación no verbal); sin embargo, en ocasiones la forma en cómo transmitimos esta información no es la más adecuada, llevando a que se puedan originar conflictos o malentendidos no solo con la familia, sino también con las personas de nuestro entorno.

Una de las claves para la adecuada comunicación es practicar un estilo asertivo, el cual se caracteriza por expresar lo que uno siente y piensa de una manera honesta, sin herir a los demás, lo que incluye la capacidad de escuchar activamente a los demás, mas no el temor de decir no cuando la situación lo amerite. A continuación, te mostramos algunas estrategias adicionales:

  • Favorece la comprensión y el respeto muto en la familia actuando con el ejemplo.
  • Permite que los demás se sientan cómodos al hablar y escucha activamente, con todos tus sentidos.
  • No descalifiques o menosprecies las ideas o sentimientos de los demás.
  • Practica la empatía, es decir, trata de entender su postura, aunque no necesariamente la compartas.
  • Emplea un tono y lenguaje corporal mesurado y tranquilo cuando expreses tu opinión, sea a favor o cuando estás en desacuerdo con algo.
  • Aprende a recibir críticas, mantén la calma y escucha el punto de vista de los demás.

 

Bibliografía

  1. Caballo, Vicente E. (1983). Asertividad: definiciones y dimensiones. Estudios de Psicología, 4(13), 51–62. doi:10.1080/02109395.1983.10821343
  2. Ayuntamiento de Madrid. (2020). Guía para la convivencia familiar durante la crisis del COVID 19. Recuperado de https://www.madrid.es/UnidadesDescentralizadas/InfanciayFamilia/EntidadesyOrganismos/CAF/EstadoAlarmaGuias/GuiaparalaConvivenciaFamiliarCAF.pdf